Vendidas en $39,710 las cartas de Liz Taylor a su amor de Miami
Las cartas que testimonian el primer amor de la célebre actriz Elizabeth Taylor durante una fugaz temporada en Miami Beach en 1949, fueron vendidas en $39,710 dólares.
La firma RR Auction, con sede en Amherst, New Hampshire, informó escuetamente en su sitio digital sobre la venta de las 64 misivas escritas por la entonces muy joven y radiante Taylor a su prometido William Pawley Jr, entre marzo y octubre de 1949.
Con los impuestos, el monto de la venta se elevó a $47,672 dólares.
No se reveló el nombre de la persona que adquirió la colección en la subasta, realizada por la internet entre el 12 y el 19 de mayo último. Los expertos habían valorado previamente la colección entre los $25,000 y $30,000 dólares.
Las cartas fueron puestas a la venta por Pawley Jr, quien reside actualmente en Pemprokes Pines, Florida, semanas después del fallecimiento de la diva, ocurrido el pasado 23 de marzo, a los 79 años. Los manuscritos habían sido comprometidas con RR Auction desde el 2008.
Los manuscritos son un excepcional testimonio de la primera relación sentimental reconocida por Taylor, entonces con 17 años, y de su presencia en Miami.
La historia de este manojo de cartas está rodeada de candidez y romanticismo típicos de la época.
La deslumbrante Liz y su madre Sara Sothern vinieron a vacacionar por una temporada a Miami Beach, invitadas por el multimillonario hombre de negocios William Pawley Sr, quien fungió como embajador de Estados Unidos en Brasil, Perú y otras naciones latinoamericanas.
Curiosamente, Pawley Sr (1896-1977) fue un hombre con sólidos nexos con Cuba desde su niñez. Su padre fue un poderoso empresario estadounidense asentado en la isla desde comienzos del siglo XX, de manera que Pawley cursó sus primeros estudios en colegios privados de La Habana y Santiago de Cuba para luego formarse en la Academia Militar Gordon, en Georgia.
Una mansión en Miami Beach
Pawler Sr regresó a Cuba en 1928 para convertirse en presidente de la compañía Nacional Cubana de Aviación Curtiss, vendida luego a Pan American Airlines en 1932. Fue amigo muy cercano del presidente Dwight Eisenhower y del director de la CIA, Allen W. Dulles. Se le vincula a numerosos operativos de la CIA, incluyendo una expedición armada de cubanos exiliados conocida como Cruz Roja, en 1963.
Para la estancia miamense, Pawley Sr les ofreció su mansión en Sunset Island II, donde las ilustres invitadas compartieron tiempo con el hijo del magnate, William Jr, entonces de 28 años.
La mansión está localizada en el 2555 Lake Ave, en Miami Beach, y está actualmente a la venta por $13.9 millones de dólares.
Fue allí donde comenzó el tórrido romance entre la adolescente Liz y William Jr, quien nunca la olvidó. William Jr se casó a los 50 años y enviudó en el 2001.
En esos encuentros surgió el compromiso amoroso, el anuncio oficial de la relación, el primer diamante que recibió la actriz y la pasión que no sobrevivió a la distancia.
“Mi primer amor maduro”, escribió Taylor a William Jr.
Y también una declaración incumplida: “Yo quiero ser tu esposa por el resto de mi vida”.
La primera carta aparece fechada en una hoja con membrete de la aerolínea Delta y fue escrita durante el vuelo de regreso a California, el 22 de marzo de 1949.
El 4 de junio la pareja anunció oficialmente el compromiso sentimental. William Jr viajó varias veces a California y trató de convencer a su novia de que abandonara su incipiente carrera en Hollywood.
Todo indicaba que Liz estaba realmente decidida a dejar sus ilusiones cinematográficas por la vida familiar.
“Estoy más que dispuesta a decir adiós a mi carrera y todo lo relacionado con ella -porque no va a dar nada-. Pero voy a estar ganando el mayor don que Dios concede al ser humano –amor, matrimonio, familia- y a ti”, escribió la muy sentimental Liz en una de sus misivas.
Pero el encanto y las promesas se desvanecieron en los meses siguientes.
La última carta fue el 9 de octubre, desde el set de rodajes de A place in the Sun (Un lugar bajo el sol), la película de George Stevens estrenada finalmente en 1951. La relación estaba ya llegando a su fin.
En noviembre de 1949, el inspirado Willian Jr recibió una carta de su futura suegra, quien lo acusaba de ser extremadamente posesivo con su hijo y que se separara definitivamente de ella. Con la ruptura, el novio despechado recibió de vuelta el anillo de compromiso que le había dado a Liz, como un gesto honorable.
Apenas meses después, Liz contrajo nupcias con Nick Hilton, heredero de la fortuna de los hoteles Hilton. Fue el primero de los ocho matrimonios que consumaría en su tormentosa vida amorosa.