Tribunal ordena libertad condicional para atacante de embajada cubana en Washington

Alexander Alazo será liberado a partir del próximo 15 de octubre bajo un riguroso plan de tratamiento siquiátrico, luego de permanecer en custodia de las autoridades estadounidenses por más de cuatro años.

Tribunal ordena libertad condicional para atacante de embajada cubana en Washington
Alexander Alazo mientras disparaba contra la Embajada de Cuba en Washington DC, el 30 de abril de 2020. Foto: Departamento de Justicia.

Un tribunal federal de Estados Unidos ordenó la libertad condicional Alexander Alazo Baró, declarado previamente absuelto por razones mentales tras perpetrar un ataque a balazos contra la embajada de Cuba en Washington en 2020.

Tras una audiencia celebrada este martes, la jueza Amy Berman Jackson determinó que Alazo, de 46 años, deberá ser liberado a partir del próximo 15 de octubre bajo un riguroso plan de tratamiento siquiátrico.

Alazo ha permanecido en custodia de las autoridades estadounidenses desde el 30 de abril de 2020, cuando con un fusil AK-47 disparó 32 balazos contra la sede diplomática cubana. Fue arrestado y acusado de cuatro cargos por acciones violentas con un arma letal contra funcionarios y propiedades de un gobierno extranjero.

Pero después de un prolongado proceso judicial y numerosas evaluaciones médicas, Berman Jackson lo absolvió de todos los cargos considerando su condición de locura, el pasado 1 de mayo. La jueza también había decidido entonces que el acusado fuera hospitalizado para un tratamiento psiquiátrico o examen psicológico que determinase si Alazo constituía una amenaza a otras personas a causa de su enfermedad mental.

De acuerdo a la ley federal, las personas declaradas no culpables solo por trastornos mentales deben permanecer detenidas hasta que un tribunal determine que su liberación no representa un riesgo sustancial de lesiones corporales a otra persona.

Alexander Alazo. Foto: CF.

En el caso de Alazo, los funcionarios de libertad condicional aprobaron un plan específico para el detenido el pasado 26 de julio. La decisión se tomó luego que médico de la Oficina de Prisiones de Estados Unidos dictaminó que cualquier riesgo que Alazo representara debido a su enfermedad mental podría mitigarse con un tratamiento, según la recomendación suscrita por los fiscales Kacie Weston y Stuart Allen.

En la orden de siete páginas emitida este martes, Berman Jackson aprobó la libertad condicional de Alazo bajo los siguientes requisitos:

  • Someterse a un plan de tratamiento específico, con la supervisión de un psiquiatra clínico cerca de su casa.
  • Alazo no podrá salir de su casa en Pensilvania durante la noche, ni tampoco del centro de la ciudad donde reside sin autorización.
  • Deberá mantenerse alejado de los establecimientos del gobierno cubano en Estados Unidos y de sus empleados.
  • Hasta nueva orden judicial, Alazo también permanecerá bajo la supervisión de los funcionarios de libertad condicional, que deben confirmar su tratamiento en curso, incluso, si es necesario, revisando un registro de sus medicamentos que deberá conservar su esposa, la enfermera Marianys Alazo Delgado.

Antes de llegar al dictamen, la jueza interrogó en el tribunal a la trabajadora social que está encargada de Alazo, a un agente de libertad condicional en Pensilvania y a la esposa de Alazo.

“El objetivo a largo plazo es que el señor Alazo esté sano, que esté con usted y sus hijos en la comunidad. Tengo la responsabilidad principal de proteger a la comunidad a través de todo eso”, manifestó Berman Jackson a la esposa de Alazo, según el diario The Washington Post.

El fallo del tribunal se sustenta en las conclusiones del doctor Paul Montalbano, siquiatra del Centro de Tratamiento Correccional en el Distrito de Columbia, quien determinó que el «en el momento de la comisión de los actos constitutivos del delito, el acusado, como resultado de una enfermedad o deficiencia mental, se encontraba en un estado de salud mental grave y era incapaz de apreciar la naturaleza y magnitud ilícita de sus actos”.

Durante la preparación de expediente judicial emergieron evidencias de que se trataba de un hombre con trastornos mentales de larga evolución.

Daños causados en el edificio de la embajada cubana por los disparos de Alazo. Foto: Policía Metropolitana de Washington DC.

Alazo vivía obsesionado con delirios de persecución y pensaba que un grupo armado procedente de Cuba vendría a matarlo delante de su familia.

A causa de esas obsesiones persistentes, el matrimonio cambió de vivienda en varias ocasiones y pernoctó en hoteles y vehículos. Alazo aseguraba que el gobierno cubano estaba tras sus pasos.

La pareja se casó en 2011 y residía con sus dos hijos pequeños y la madre de Alazo en Middletown, Pensilvania.

En marzo de 2020, un mes antes del tiroteo, Alazo había sido admitido en un hospital psiquiátrico, donde fue diagnosticado por trastorno delirante y se le recetó medicación. Luego del alta médica, procedió a adquirir el rifle AK-47, que mantuvo consigo desde entonces como un arma de protección.

Alazo emigró hacia México con una visa religiosa en 2003 y cuatro años después se refugió en Estados Unidos tras cruzar la frontera por la zona de Texas y solicitar asilo político a las autoridades estadounidenses. Regresó a Cuba en 2014 y comenzó a realizar prédicas en una iglesia evangélica, pero dijo haber recibido amenazas y se vio obligado a retornar a Estados Unidos.

Las autoridades cubanas aseguran que Alazo viajó en ocho ocasiones a la isla hasta 2015 y recibió siempre asistencia consular sin ninguna dificultad en su relación con los representantes gubernamentales de su país de origen.

El gobierno cubano ha culpado desde un comienzo a Estados Unidos por prolongar el caso de Alazo y no calificarlo como una acción terrorista. También condenó en su momento la decisión de Berman Jackson de absolver al acusado por razones mentales.

Al producirse el ataque, había siete personas en el interior de la embajada cubana, aunque nadie resultó herido, pero el edificio sufrió graves daños tanto en la fachada como en su interior.

El 24 de septiembre de 2023 un individuo lanzó dos cocteles molotov sobre la cerca perimetral de la embajada de Cuba en Washington y contra la fachada delantera de esa instalación. Hasta el momento las autoridades estadounidenses no han emitido ninguna información sobre la pesquisa del incidente ni se ha producido una acción legal al respecto.

CATEGORÍAS
TAGS

COMENTARIOS