Serie Mundial, juego 1: Juegazo para la memoria
No se podía pedir más emociones ni más tensiones para una noche beisbolera por todo lo alto, con homenaje previo al gran Fernando Valenzuela. Esta noche tendremos el segundo partido a partir de las 8:08 pm.
Por Alberto Águila
Fue un juegazo digno de una Serie Mundial donde llegan a la final los dos equipos con más ganadores, los dos equipos con más historial y talento acumulado.
Un fabuloso jonrón de Freddie Freeman con bases llenas en el momento más dramático del partido, proporcionó una sensacional victoria de 6×3 a los Dodgers de Los Angeles sobre Yankees de New York en diez emocionantes episodios.
No se podía pedir más emociones ni más tensiones para una noche beisbolera por todo lo alto, con homenaje previo al gran Fernando Valenzuela, que desde donde esté debió estar bendiciendo la jornada en el Dodger Stadium, que le tributó un minuto de silencio con un número 34 marcado en el box.
El partido llegó al final del noveno inning con empate a dos anotaciones y ya metidos en el décimo los Yankees anotaron una angustiosa carrera que por unos instantes silenció al estadio, colmado de 55 mil aficionados. Con el desafío 3×2, vino la tanda baja de los Dodgers a consumir sus turnos.
Con el out 25 colgado en el pizarrón por elevado del catcher Will Smith al jardín derecho y la afición angelina en ascuas, Gavin Lux negoció un boleto de lujo y Tommy Edman produjo un metrallazo a la banda derecha para poner la potencial carrera del gane en base. El manager neoyorquino Aaron Boone trajo al zurdo cubano Néstor Cortés para enfrentar al peligroso Shohei Ohtani, que no tuvo su mejor noche, y falló en un largo fly de foul por la banda izquierda, capturado en una jugada espectacular de Alex Verdugo. El inning se puso en punto de mate, pero con la caída de Verdugo dentro del graderío, no pudo evitar el avance de los corredores a segunda y tercera.
Fue entonces que le ordenaron a Cortés qué otorgara base intencional al peligroso Mookie Betts y Freddie Freeman asumió el reto con la responsabilidad de al menos empatar el partido. Cortés se equivocó, le tiró una bola al medio y el canadiense rechazó la esférica para encajarla en las gradas del jardín derecho en medio de una euforia descomunal en el estadio. Un batazo para la Historia: primera vez que un juego de Serie Mundial se decide por un grand slam para dejar tendidos en el campo a los rivales.
El partido fue pleno de dramatismo de principio a fin. No se puede olvidar el jonrón de Giancarlo Stanton en el sexto con uno a bordo y menos, y otras joyas defensivas que marcaron la jornada. Edman no estuvo seguro en el campo corto, pero también capturó varios metrallazos. Excelente Jazz Chisholm en el desempeño de tercera, que no es su posición acostumbrada.
¿Se equivocó el piloto Aaron Boone al traer al zurdo cubano a trabajar en la parte baja del décimo, un hombre que no tiraba desde el 18 de septiembre, que es abridor, no está acostumbrado a salir de relevo? ¿No debió acudir al zurdo Tim Hill, que releva en estas situaciones y que lo hizo ante Cleveland hace una semana? Me parece que fue un error, porque era mejor decisión Hill, pero en momentos como estos, si hubiera salido bien el relevo, hoy estaríamos elogiando a Boone.
Como me aventuré a decir en mi comentario previo a la arrancada de la Serie Mundial, quizás el ganador de esta confrontación de trenes sea el equipo que mejor manejo haga de su bullpen.
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