El COI rompe el silencio y cierra filas con Trump

Por Miguel Hernández

Luego del triunfo de Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos, el pasado 5 de noviembre, la prensa internacional ha estado monitoreando y comparando la reacción de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) y del Comité Olímpico Internacional (COI).

Es lógico el interés, porque los dos mayores eventos deportivos del planeta, la Copa del Mundo de 2026 y los Juegos Olímpicos de Los Angeles en 2028, se celebrarán en Estados Unidos durante el mandato del republicano.

Analistas comenzaron a decir que la FIFA parecía estar en mejores condiciones para reanudar las relaciones cálidas con Trump en comparación con el COI, a juzgar por las reacciones públicas de estos días y las interacciones anteriores.

El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, felicitó a Trump en sus redes sociales incluso antes de la victoria del Colegio Electoral, mientras el COI había guardado silencio público, según comentó Associated Press.

Sin embargo desde este viernes 22 de noviembre la percepción puede ser otra.

En exclusiva, un portavoz del Comité Olímpico Internacional me ha revelado este viernes desde Lausana lo siguiente: “Nosotros confirmamos que el Presidente del COI, Thomas Bach, ha enviado una carta de felicitación al Presidente electo Donald Trump por su elección como el 47 Presidente de Estados Unidos de América”.

Este anuncio fue en respuesta a nuestra pregunta sobre la posibilidad de una reunión de Bach con Trump antes de la elección de un nuevo Presidente del COI.

Esta elección se llevará a cabo en la Sesión del COI, con sede en Grecia, entre el 18 y el 21 de marzo de 2025. Pero oficialmente el mandato de Bach terminará tres meses después.

El próximo 30 de enero en Lausana en una reunión a puerta cerrada la Junta Ejecutiva del COI escuchará las presentaciones de los siete candidatos a la presidencia del COI: el español Juan Antonio Samaranch, el británico Sebastián Coe, el francés David Lappartient, el japonés Morinori Watanabe, el jordano Feisal al Hussein, el sueco Johan Eliasch y la zimbabuense Kirsty Coventry.

Desde la reciente victoria electoral de Trump, el COI y Bach no lo habían reconocido. Cuando se le preguntó por qué no había un reconocimiento formal de su triunfo, el COI citó su tradición de neutralidad y de no tomar partido político.

Sin embargo, esta respuesta del COI a mi interrogante permite otra reflexión. Por otra parte, no quedó claro si la carta fue enviada este viernes o con más antelación.Tampoco se precisa si habría un encuentro de Bach con Trump antes de este sufragio para elegir al décimo Presidente del COI en su historia.

O si el alemán irá con su sucesor a Washington lo más pronto que se pueda ante el desafío de los Juegos de Los Angeles y a sabiendas que por el escritorio de Trump debe pasar toda la parafernalia de la seguridad y los visados de la cita estival que será la tercera para la ciudad norteamericana.

Estados Unidos será, además, el primer país en organizar cinco Juegos Olímpicos de Verano: San Luis 1904, Los Angeles 1932, 1984 y 2028, y Atlanta 1996.

Pero Trump ya había dado su respaldo a los Juegos durante su primer mandato y como queriendo que se le recordara, en agosto, mientras se festejaba la ceremonia de clausura en París, en la plataforma Truth Social el expresidente rememoró que había trabajado con el Comité Organizador de Los Angeles y el COI para lograr que los Juegos Olimpicos de 2028 se celebraran en Estados Unidos.

“Les dí lo que querían escuchar y cumplí con mi tarea” escribió.“De hecho, fui responsable de conseguir la Copa del Mundo (que tendrá de subsedes a México y Canadá) y los Juegos Olímpicos”, repitió este mes Trump a Bill Belichick en el podcast Let’s Go.

Ya tendrá un “entrante” el año que viene con la Copa Mundial de Clubes de la FIFA, con la final en Nueva Jersey.

Se necesita el apoyo del presidente de Estados Unidos para las múltiples agencias federales que participan en la organización de los Juegos Olímpicos. La seguridad puede ser el mayor gasto, junto con otros servicios que van desde funciones diplomáticas hasta la previsión meteorológica.

En el verano olímpico Trump entró también en contradicción con el COI por el caso de la controvertida boxeadora Imane Khelif, cuando la atacó en uno de sus últimos videos de campaña. «Los hombres pueden golpear a las mujeres y ganar medallas», dijo en un video en el momento que le levantaban la mano a Khelif en el ring olímpico.

La argelina fue centro de la controversia más sonada de los Juegos (y lo sigue siendo) por su inclusión en el torneo de boxeo femenino junto a Lin Yu-Ting, de China Taipei, ambas campeonas olímpicas.

Las dos habían sido descalificadas por la Asociación Internacional de Boxeo en marzo de 2023 por no superar las pruebas de elegibilidad de género realizadas por la organización, que dirige el oligarca ruso Umar Kremlev, pero recibieron el permiso para competir en la categoría femenina en París por parte del Comité Olímpico Internacional, que argumentó que «nacieron mujeres y compitieron como mujeres».

Ante críticas de la IBA, el COI respondió que dichas pruebas de elegibilidad habían sido «inventadas» y realizadas sin transparencia ni garantías, al tiempo que tildó de parcial a la federación presidida por Kremlev, a la que excluyó del reconocimiento olímpico en 2023.

La polémica se ha revivido a principios de noviembre luego que un periodista francés se hizo eco de un supuesto informe médico que aseguraba que en 2023 una resonancia magnética determinó que la pugilista argelina no tenía útero, sino testículos internos, y un «micropene» parecido a un clítoris agrandado.

En respuesta a las acusaciones, el COI dijo que Imane Khelif ha emprendido acciones legales contra las personas que comentaron sobre su situación durante los Juegos Olímpicos de París 2024, y también está preparando una demanda en respuesta a las últimas informaciones.

“El COI no hará comentarios mientras se lleve a cabo la acción legal, ni sobre las informaciones de los medios de comunicación sobre documentos no verificados cuyo origen no se puede confirmar”, dijo el organismo en una declaración.

A lo largo de su campaña, Trump se comprometió a prohibir que las mujeres transgénero compitan en deportes femeninos, una política que pretende hacer cumplir durante su segundo mandato que concluirá justo en el año olímpico. Queda abierta la interrogante sobre cómo una acción federal sobre este tema podría influir en los Juegos de Los Angeles.

Bach ya había realizado una visita a la Casa Blanca en junio de 2017. Fue a puerta cerrada y no se dieron a conocer detalles de la visita a Trump, cuyo objetivo se centró en la candidatura de Los Angeles. Nunca se publicaron fotos ni ningún reporte de Trump en el recibimiento a la delegación olímpica que llegó de Suiza, Los Ángeles y Colorado Springs.

Tiempo después el COI decidió que Paris organizaría la versión de 2024 y Los Angeles la de 2028.

Entretanto la promesa del presidente electo de hacer un “cambio radical” en el gasto gubernamental ha generado preocupaciones sobre el esfuerzo de Los Angeles.

El comité organizador privado de los Juegos LA28 ha prometido cubrir el costo principal de los Juegos, que se estima en $6,900 millones de dólares, mediante patrocinios corporativos y otros ingresos. Pero se espera que los funcionarios federales proporcionen una ayuda sustancial para los gastos relacionados, menciona el periódico Los Angeles Times.

Ahora, con el nombramiento de Trump de los empresarios Elon Musk y Vivek Ramaswamy para un nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental, hay dudas sobre la voluntad de la Casa Blanca de colaborar, según el diario angelino. Musk, en particular, ha hablado de encontrar recortes de $2 billones de dólares.

Los líderes de LA28 dijeron que no están preocupados.

“Es la naturaleza del mundo en el que vivimos”, declaró Casey Wasserman, presidente de LA28. “Hemos tenido un gran éxito tanto con las administraciones republicanas como con las demócratas, y no tenemos dudas de que seguirá siendo así”.

Los Juegos de Verano de 2028 también requerirán que el Departamento de Estado procese miles de visas de último momento para atletas y entrenadores extranjeros. Algunos equipos nacionales llegarán de países que tienen relaciones tensas con Estados Unidos, recordó la publicación.

Pero como Los Angeles también juega un papel importante en la Copa Mundial de 2026, los organizadores olímpicos locales dijeron que no han detectado señales de resistencia en las conversaciones con el equipo de transición de Trump u otros funcionarios de Washington.

Sus comentarios se produjeron en una conferencia de prensa que concluyó tres días de reuniones con funcionarios del Comité Olímpico Internacional.

“El presidente electo Trump ha sido increíblemente claro sobre la responsabilidad que tenemos al organizar eventos mundiales”, dijo Wasserman. “Viajes, seguridad, transporte, logística: hay mucho que ellos brindan y es bien conocido y aceptado en todo el gobierno federal”.