Fallece en Miami el poeta Reinaldo García Ramos, fundador de la revista Mariel

El poeta cubano Reinaldo García Ramos, reconocida figura de la llamada Generación del Mariel, falleció este lunes en Miami a los 80 años, confirmaron fuentes familiares.

El deceso de García Ramos se produjo en horas de la tarde, acompañado de su compañero Sergio Chávez Bonora y de sus primos Marianela F. Molina y Milkos D Sosa, quien transmitió la noticia. El escritor padecía de un cáncer que se agravó en los últimos meses.

“Hasta sus últimos días Rei habló de sus libros, especialmente el que salió este año (Una amiga en París), y de la posibilidad de que le diera tiempo escribir otro. Su único deseo es que honren su memoria manteniendo su obra literaria viva”, escribió D Sosa.

Hombre culto, laborioso y sensible, García Ramos deja como legado una vida de compromiso intelectual e intensa creación poética, junto con un arraigado sentido de la amistad y el afecto hacia sus seres queridos.

Nacido en Cienfuegos en 1944 en el seno de una familia descendiente de españoles, a los tres años se trasladó a La Habana, donde transcurrieron sus estudios y primeros empeños literarios hasta su partida de Cuba, en 1980.

El triunfo de la revolución de Fidel Castro lo sorprendió con 14 años mientras concluía su bachillerato y ya había comenzado a interesarse por la literatura.

En 1962 logró publicar su primer libro de poesía, titulado Acta, gracias a las ediciones independientes El Puente.  García Ramos se incorporó de lleno al proyecto editorial encabezado por José Mario Rodríguez y Ana María Simo, a quien lo uniría una larga amistad hasta el final de su vida.

Con Simo preparó ese mismo año la antología Novísima Poesía Cubana. El Puente fue censurado y clausurado por el régimen cubano en 1965.

García Ramos estudió Lengua y Literatura Francesas y se graduó en 1967. Laboró en el Centro de Investigaciones Literarias de la Casa de las Américas y en la Editorial Arte y Literatura antes de su salida de Cuba durante el éxodo del Mariel, el 20 de mayo de 1980.

Se radicó en Nueva York, a instancias de Simo, y luego de laborar en las agencias noticias UPI y Associated Press logró un puesto de traductor de Naciones Unidas, donde laboró hasta su retiro en 2001.

García Ramos figuró entre los fundadores de la revista Mariel (1983-1985), junto a Reinaldo Arenas, Carlos Victoria y un grupo de escritores llegados por el puente marítimo Mariel-Cayo Hueso. La revista no solo fue un espacio de creación y promoción para numerosos poetas, narradores, pintores y teatristas, sino que logro convertirse en un puente hacia otras generaciones literarias e insertarse en la tradición intelectual del exilio cubano. La revista se hacía con el aporte personal de $100 dólares de cada miembro del grupo de fundadores.

En 2003, al cumplirse el 20 aniversario de Mariel, García Ramos decidió editar un número especial con textos antológicos e ilustraciones de los principales autores que le dieron vida. En 2013, también promovió la digitalización de la revista.

La faena de García Ramos estuvo marcada también por una producción poética que acaparó las principales energías de su trabajo intelectual y su talento literario.

Entre títulos sobresalen los poemarios El buen peligro (1987), Caverna fiel (1993), En la llanura (2002), El ánimo animal (2010) y Espacio circular (2017), el libro de ensayos y comentarios Una medida exacta (2017), y el relato autobiográfico Cuerpos al borde de una isla (2010).

Su último libro, Una amiga en París (2024) es una selección de cartas que escribiera a Ana María Simo desde La Habana entre 1968-1972. Simo las conservó en París y se las entregó en Nueva York García Ramos salió de Cuba.

En 2006 ganó XI Premio de poesía Luys Santamarina-Ciudad de Cieza, en España, por su libro Obra del fugitivo.

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