Capturado depredador sexual que se escondió en Cuba
Por REDACCIÓN CAFÉFUERTE
Cuba sigue siendo un destino favorito para los fugitivos de la justicia estadounidense. Bill Weimar, un empresario de Alaska buscado por abusar sexualmente de una menor, fue arrestado el sábado tras su arribo a México desde la isla caribeña.
El multimillonario Weimar, de 70 años, fue rastreado por las autoridades estadounidenses hasta un elegante hotel en La Habana el pasado jueves. Pero el Servicio de Alguaciles Federales del distrito de Tampa consideró poco probable el arresto, debido a la inexistencia de un tratado de extradición entre Washington y La Habana.
Cuando las autoridades se habían dado casi por vencidas sobre su captura, el hombre se apareció inesperadamente en Cancún, México, el viernes.
Fue finalmente detenido con la cooperación de la Armada mexicana y entregado a las autoridades de Texas, donde el lunes aguardaba por su extradición a Florida.
Weimar era buscado por abusar sexualmente de una niña de seis años de Sarasota, Florida, el pasado enero. La orden de captura por ese delito se emitió el 24 de enero y desde entonces estaba prófugo.
El incidente con la menor se produjo en agosto mientras Weimar estaba en libertad condicional. La acusación pudiera llevarlo a prisión con una sentencia de cadena perpetua.
El empresario se había declarado culpable de conspiración para sobornar a un candidato al senado de Alaska que habría respaldado un proyecto de prisión privada en el año 2004. Fue sentenciado a seis meses de cárcel más otro período de libertad condicional.
Tras cumplir su sentencia se trasladó a la ciudad floridana de Sarasota, donde vivía mayormente a bordo de su yate Renewal II, de 60 pies de eslora.
Weimar hizo su fortuna a base de contratos con el gobierno federal para operar centros de reinserción e instalaciones de pruebas de drogas en Anchorage, Alaska.
Se desconocen las razones de Weimar para viajar desde Cuba hacia México o si existió alguna cooperación entre las autoridades estadounidenses y cubanas en el caso.
Las autoridades tenían bajo vigilancia el bote de Weimar, que al parecer se preparaba para “un largo viaje” desde Sarasota.
Preparando un largo viaje
Ron Lindbak, vocero de la oficina de Alguaciles Federales en Tampa, relató que la novia de Weimar había empleado a un patrón de bote para viajar a los Cayos de la Florida, pero inesperadamente la persona contratada dejó de trabajar para ella.
“Todo indica que ella preparó el bote para el viaje, pero luego cambió de idea por alguna razón y viajó sin el patrón inicialmente contratado”, contó Lindbak. “Fue el hermano de ella quien ocupó el lugar del patrón”.
Evidentemente, la mujer tenía planeado encontrarse con Weimar en algún punto y luego escapar en el bote lejos de Estados Unidos.
El martes , la novia de Weimar y su hermano abandonaron Sarasota a bordo de la embarcación hacia un destino desconocido.
“No tenemos idea dónde ellos estuvieron entre el martes y el viernes”, afirmó Lindbak.
Pero todo apunta a que el Renewal II atracó en una marina al norte de La Habana y permaneció allí hasta el viernes, cuando regresó a Sarasota. Ese mismo día, Weimar viajó a Cancún.
Aunque en Cuba viven unos 70 fugitivos del FBI, las autoridades cubanas se han comprometido a no acoger más prófugos de la justicia estadounidense, según reconocen los informes anuales del Departamento de Estado desde el 2005.
Desde que el gobernante Raúl Castro asumió el mando en Cuba, en julio del 2006, han sido entregados a las autoridades estadounidenses cuatro prófugos que intentaron refugiarse en la isla, uno de ellos, Joseph Adjmi, buscado durante 40 años.