Estados Unidos niega maltratos a espía cubano
Las autoridades de Estados Unidos desmintieron hoy que el espía convicto cubano Gerardo Hernández sea víctima de maltratos y torturas en la cárcel y negaron que esté confinado a una celda de dos metros por uno.
“Ha habido mucha desinformación sobre las condiciones de confinamiento de Hernández”, dijo a CaféFuerte Felicia Ponce, portavoz del Buró Federal de Prisiones (FBOP).
“El señor Hernández se encuentra actualmente en nuestra instalación en Victorville, California, donde todas las celdas miden al menos 12 pies x 8 pies (3,66 x 2,44 metros aproximadamente)”.
La funcionaria señaló que debido a leyes sobre la privacidad, el FBOP tiene limitaciones sobre la información específica que puede suministrar. “Sin embargo, podemos decirle que todos los reclusos en custodia del Buró de Prisiones son tratados justamente y se les ofrece tratamiento médico adecuado”, agregó.
El gobierno cubano ha lanzado una campaña mediática para lograr la liberación de Hernández, quien cumple dos condenas a cadena perpetua por su responsabilidad en el derribo de dos avionetas de Hermanos al Rescate en 1996. Cuatro pilotos residentes en Miami murieron en el ataque de la aviación cubana.
El pasado 30de julio, el gobernante Fidel Castro dijo que las condiciones de confinamiento de Hernández -jefe la Red Avispa, desmantelada en 1998- equivalían a tortura.
“¿Hizo algo? No, nada. Y este castigo no lo decidió la prisión. Se reunieron cuatro oficiales del FBI para decidir y decidieron. ¡Eso es tortura!”, aseguró durante un encuentro con militantes de la Unión de Jóvenes Comunistas en el Palacio de las Convenciones.
El presidente del parlamento, Ricardo Alarcón, declaró que Hernández padece de hipertensión arterial, ha contraído una bacteria circulante entre la población penal y no ha recibido atención médica adecuada. Detalló que está encerrado en una celda de dos metros de largo por uno de ancho bajo temperaturas superiores a los 35 grados Celsius y que ni siquiera le permitieron llevar su reloj, radio portátil, objetos de aseo personal y materiales de lectura.
Alarcón, quien en diciembre de 2009 admitió que a Hernández le quedaban pocas opciones legales, llamó usar “los medios alternativos de comunicación”, para pedir la liberación del hombre de 45 años.
El domingo, activistas en favor del gobierno cubano participaron en una jornada en Twitter “por la libertad de los cinco y para denunciar el maltrato a Gerardo”, y advirtieron que solo terminará “cuando se haga justicia”.
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