Cuba rechaza apelación del contratista Alan Gross
Por WILFREDO CANCIO ISLA
El contratista estadounidense Alan P. Gross tendrá que cumplir 15 años de prisión en Cuba, a menos que el gobierno de Raúl Castro acceda a concederle un indulto por razones humanitarias.
La Sala de los Delitos contra la Seguridad del Estado del Tribunal Supremo Popular emitió resolución definitiva en la que desestima la impugnación de Gross y su abogada Nuris Piñero Sierra sobre la sentencia dictada por el Tribunal Provincial Popular de La Habana, el pasado marzo.
“La sentencia del Tribunal Supremo rechaza de manera argumentada los elementos de inconformidad expuestos por el acusado y su letrada contra la decisión de la instancia provincial, quienes tuvieron la oportunidad de exponerlos de forma directa ante los jueces que conocieron del caso, en ocasión de la vista pública que a esos efectos les fue concedida por el máximo órgano judicial del país, el 22 de julio”, anunció este viernes un comunicado oficial.
La decisión del máximo órgano judicial cubano se produce apenas horas después que el Congreso estadounidense acordara liberar $20 millones de dólares para respaldar el movimiento disidente dentro de la isla. El tema de la ayuda financiera a la oposición cubana había sido foco de debates en Washington entre legisladores partidarios de retener los fondos y los que respaldaban la entrega inmediata del dinero.
El financiamiento para actividades de la disidencia cubana se canalizan mediante la Agencia de EEUU para el Desarrollo Internacional (USAID), entidad mediante que Gross fue enviado como subcontratista a Cuba.
Con este veredicto, Gross queda sujeto a dos opciones para poder salir en libertad antes de cumplir la condena: una revisión judicial del caso o un indulto humanitario del Consejo de Estado, firmado por el gobernante Raúl Castro.
Washington consideró lamentable la decisión y reclamó la liberación inmediata del contratista.
“Deploramos el fallo del Tribunal Supremo de Cuba al mantener la culpabilidad del ciudadano Alan Gross”, dijo Mark Toner, portavoz del Departamento de Estado en una comunicación escrita. El es un trabajador dedicado al desarrollo internacional, quien ha consagrado su vida ayudar a personas en más de 50 países y estaba en Cuba para ayudar a la gente a conectarse con el resto del mundo”.
El funcionario exhortó al gobierno cubano a liberar “inmediata e incondicionalmente” a Gross, y permitirle retornar con su familia para poner fin a la “larga ordalía que comenzó con su detención hace más de un año”.
“Estados Unidos se mantiene enfocado y preocupado por el bienestar de Alan Gross y continuaremos apelando a todos los canales diplomáticos disponibles para presionar por su inmediata liberación”.
Gross, de 62 años, fue declarado culpable del delito de Actos contra la Independencia o la Integridad del Estado en un juicio oral celebrado el 4 de marzo. Se le inculpó por introducir infocomunicaciones para crear redes internas como parte de un programa del gobierno de Estados Unidos para subvertir el orden interno.
Desde su detención -el 3 de diciembre del 2009- ha perdido 90 libras y enfrenta varios padecimientos, agravados por su depresión por los escollos enfrentados por su familia.
Decepción familiar por el fallo
De acuerdo con el reporte, durante el proceso de apelación “se ha contado con todas las garantías y derechos sobre el debido proceso judicial previstos en la Constitución, las leyes cubanas y los instrumentos internacionales relativos a estos temas”.
El texto agregó que el gobierno cubano le facilitó a Gross el contacto sistemático con sus familiares y el acceso regular a la asistencia y atención por parte de funcionarios consulares de la Oficina de Intereses de (USINT) de Estados Unidos en La Habana.
La familia de Gross dijo sentirse decepcionada aunque no sorprendida con la decisión.
“Aunque no nos sorprende, estamos muy decepcionados con el fallo de hoy, que marca el final de un proceso legal de Alan en Cuba. La familia tiene el corazón roto por la decisión de hoy, pero mantiene la esperanza de que sigue habiendo espacio para una solución diplomática a este asunto”, indicó un comunicado divulgado por la oficina del abogado Peter J. Kahn.
Kahn agregó que al margen del espectro político de las relaciones con Cuba, es una tragedia para Gross cumplir una condena de 15 años de prisión por sus esfuerzos para mejorar la conectividad de internet para la comunidad judía en Cuba.
“Al entrar en su mes 21 en una prisión cubana, Alan y su familia entera han pagado un precio personal enorme en la contienda política entre Cuba y Estados Unidos. Ahora, más que nunca, hacemos un llamado a los dos países para resolver diplomáticamente la disputa sobre las actividades de Alan, y pedirle al presidente Raúl Castro la liberación de Alan inmediatamente por razones humanitarias”, concluyó el mensaje.
Además de sus problemas personales de salud, la familia de Gross ha atravesado una verdadera odisea desde su arresto en la isla. Su hija fue operada de cáncer y sometida a un tratamiento de quimioterapia, su madre fue diagnosticada con un cáncer de pulmón, sin posibilidades de cirugía, y su esposa, Judy Gross, fue intervenida quirúrgicamente semanas atrás.
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Sentencia sobre apelacion de Alan Gross se conocerá en los próximos días