Cuba dona cemento, tejas y colchones a Venezuela
Cuba entregó este lunes a las autoridades de Venezuela el primer cargamento de 2,355 toneladas de cemento de las 6,900 que donará al gobierno de Hugo Chávez para construir viviendas a los damnificados por las torrenciales lluvias de las últimas semanas.
El envío llegó por barco en la tarde del lunes al puerto de La Guaira, en el estado de Vargas, y fue recibido oficialmente por el embajador cubano Rogelio Polanco en medio de una algarabía con redobles de banda municipal.
“Con ello Cuba quiere contribuir muy modestamente al proceso de reconstrucción y construcción de nuevas viviendas en Venezuela”, dijo Polanco en declaraciones a la emisora oficial Venezolana de Televisión.
El diplomático cubano explicó que este es apenas el primero de nueve envíos con cemento y otros materiales de construcción que continuarán llegando a Venezuela en las próximas semanas y hasta el 5 de febrero.
Agregó que la contribución de Cuba ayudará al compromiso hecho por Chávez de “brindarle una vivienda modesta pero digna a quienes han quedado desamparados”.
Las intensas lluvias que azotaron Venezuela han dejado unos 130 mil damificados con necesidades de vivienda.
Además del cemento, el donativo del gobierno de Raúl Castro incluirá 500 mil metros cuadrados de tejas de fibrocemento con sus ganchos de anclaje, 200 mil metros cuadrados de cerámica para pisos y 32 mil colchones de espuma para ser repartidos en los refugios, los cuales constituyen el 50 por ciento de la reserva cubana.
En situación difícil
“Es nuestra contribución al pueblo venezolano en medio de la adversidad, como lo ha hecho Venezuela con Cuba cuando hemos sido azotados por los huracanes o hemos estado en situaciones difíciles”, declaró Polanco.
Los envíos hacia Venezuela se producen en momentos en que el gobierno cubano busca incrementar la producción y distribución interna de materiales de construcción para aliviar el déficit de 600 mil viviendas que arrastra el país, agravado tras el paso de tres devastadores ciclones en el 2008.
Según datos oficiales, durante el presente año las obras constructivas cayeron en un 12 por ciento y la edificación de viviendas en un 6.7 por ciento con relación al 2009.
“Este donativo es prácticamente simbólico y pienso que Cuba no tenía otra alternativa que hacer el simulacro, porque de no ser por el petróleo y las dádivas de Venezuela en este país estaríamos ahora comiendo tierra”, comentó desde La Habana el economista disidente Oscar Espinosa Chepe.
El gobierno de Raúl Castro ha manifestado sus planes para incrementar hasta 60,000 la edificación de viviendas en el próximo quiquenio, pero en el actual año apenas pasaron las 32,000.
A partir de enero Cuba liberará la venta de materiales de construcción en pesos nacionales y eliminar la venta subsidiada en los rastros estatales, como se venía haciendo hasta ahora.
Como parte de las medidas para resolver los crónicos problemas de vivienda, el gobierno cubano autorizó a comienzos de año la venta liberada de materiales de construcción, liberó el trabajo por cuenta propia para albañiles y pequenos contratistas, y pretende flexibilizar las rentas y operaciones de compra-venta de inmuebles a partir del 2011.
Menos cemento en Venezuela
Pero Cuba y Venezuela tienen establecido un convenio desde el 2006, mediante el cual el gobierno chavista adquirió 500 mil toneladas de cemento cubano sólo en el primer año del acuerdo.
Chávez decidió nacionalizar empresas cementeras establecidas en el país como Cemex, Lafarge y Holcim, y creó una nueva llamada Cemento Cerro Azul con el fin de incentivar la producción nacional y eliminar la exportación del material constructivo.
Al producirse la estatización, el gobierno dijo que el abastecimiento de cemento estaba garantizado.
Sin embargo, la estrategia chavista ha traído una caída de la producción de los materiales constructivos y, a la vez, la disminución de las unidades habitacionales disponibles para la venta y el alquiler.
Ante la emergencia provocada por las lluvias, Chávez manifestó que acelerará el proceso de construcción de casas, a espaldas de que el país tiene menor capacidad de producir cemento y varias plantas están detenidas por reparaciones.