Condenan a 18 años de prisión a pareja que descuartizó a dentista cubano en Chile

Reinier Sánchez González tenía 32 años y había llegado a Chile como turista en 2016. El crimen estuvo motivado por una relación sentimental.

Condenan a 18 años de prisión a pareja que descuartizó a dentista cubano en Chile
Reinier Sánchez González, dentista cubano aseinado en Chile. Foto: Facebook.

Dos propietarios de una clínica dental en Chile fueron condenados a 18 años de cárcel por el asesinato del dentista cubano Reinier Sánchez González, cuyo cuerpo apareció desmembrado en 2021.

El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Chillán, en la región sureña de Ñuble,  estableció la pena de presidio efectivo para Clara Elena González Figueroa, de 39 años, y Rolando Ricardo Villagrán Retamal, de 55, condenados como autores del delito consumado de homicidio en el caso del odontólogo cubano, según fuentes judiciales citadas por la prensa chilena.

Además, Villagrán deberá cumplir una pena de 800 días por ejercicio ilegal de la profesión de dentista en la comuna de Lampa, entre 2017 y 2021.

En una resolución unánime emitida por el tribunal el pasado 19 de octubre se dio por acreditado tanto la ocurrencia de los delitos como la participación culpable de ambos imputados en los hechos, indica el diario chileno La Tercera.

Muerte por asfixia

Los restos del joven dentista fueron hallados el 3 de agosto de 2021 en las aguas del río Perquilauquén, en Ñiquénen el límite de las regiones de Ñuble y Maule.

“Lo anterior, por cuanto la prueba de cargo, en particular la prueba testimonial, documental y pericial, junto a otros medios incorporados al juicio, permitieron adquirir al tribunal la convicción, más allá de toda duda razonable que, en primer lugar, partes del cuerpo sin vida de Reinier Sánchez fueron encontrados el día 3 de agosto de 2021 en la ribera del río Perquilauquén y que la causa de su muerte fue la asfixia por estrangulación causada por terceros, lo que configura, en principio, un delito de homicidio”, señaló el acta de deliberación del tribunal.

El dictamen judicial previo a la sentencia menciona que las evidencias fueron suficientes para establecer una serie de indicios que permitieron atribuir la participación culpable a los encartados en la muerte de la víctima, sino también el haber obrado con premeditación.

Ocultamiento del cuerpo

 “Mediante pruebas periciales de geolocalización, de análisis de tráfico de datos y llamadas y documental, se dio cuenta que la encartada, en coordinación con el coimputado, realizó la compra de elementos utilizados para el desmembramiento y ocultamiento posterior del cuerpo de la víctima y que fueron hallados en el sitio de suceso”, precisó el documento.

La Fiscalía había solicitado penas de cadena perpetua para ambos acusados, con la presentación de más de 50 testigos durante las audiencias judiciales.

El homicidio se concretó entre el 4 y 5 de julio de 2021 y los análisis al posicionamiento de los teléfonos celulares de la víctima y la pareja dieron cuenta de un traslado de los tres, por aproximadamente 12 horas, desde la comuna de Lampa, en la región metropolitana, hasta Ñuble.

“Luego, mediante las mismas pericias, se logró establecer la ubicación de los teléfonos celulares tanto de la víctima como de los acusados, en un periplo conjunto desde la localidad de Lampa al sur del país, hasta las inmediaciones del río Perquilauquén, para luego volver, durante la misma noche a la Lampa, lugar en donde el móvil del ofendido se mantuvo conectado de forma intermitente a la antena correspondiente a la acusada, enviando mensajes de WhatsApp a su familia en Cuba que resultaron ser implantados; del mismo modo, se estableció la presencia de sangre de la víctima en el vehículo Hyundai Tucson de la encartada González, mismo vehículo que fue utilizado por los encartados en el referido viaje al sur y que, fue lavado posteriormente, con el fin de ocultar evidencias, sin éxito”, detalló el dictamen.

Víctima de maltratos

Reinier Sánchez González tenía 32 años y había llegado a Chile como turista en 2016, pero terminó radicándose en el país. Su madre vive en La Habana.

Tras probar suerte en varios trabajos, que incluyó un período como obrero de la construcción,  a comienzos de 2018 comenzó a ejercer su profesión en la clínica Punto Dental de Lampa.

Allí conoció al propietario del recinto médico en pleno centro de Lampa y quien sería su jefe por más de dos años.

El dentista cubano comenzó a ser víctima de maltratos por parte de Villagrán Retamal y fue testigo de múltiples irregularidades cometidas en la clínica, donde el propietario ejercía haciéndose llamar por “Damián”, suplantando a su hijo que es odontólogo.

Villagrán Retamal es graduado de Derecho, pero la suplantación le valía para atender pacientes en el lugar.

Encrucijada sentimental

Pero el doctor cubano se convirtió  en una piedra en el camino, no por razones profesionales, sino porque se involucró sentimentalmente con Clara González, la copropietaria de la clínica y pareja de su jefe.

Los amantes furtivos lograron  mantener en secreto la relación, pero Villagrán Retamal terminó por enterarse y desde abril de 2021 el dentista cubano se vio forzado a abandonar Punto Dental.

El 3 de agosto de 2021, en el límite de las regiones de Ñuble y Maule, un adolescente divisó restos humanos en el río Perquilauquén en unas bolsas plásticas y avisó a las fuerzas policiales. Fue así como comenzó la investigación del crimen.

El dentista cubano se había tatuado un angel en su espalda. Foto: Tomada de Facebook.

El 3 de agosto de 2021, en el límite de las regiones de Ñuble y Maule, un adolescente divisó restos humanos en el río Perquilauquén en unas bolsas plásticas y avisó a las fuerzas policiales. Fue así como comenzó la investigación del crimen.

Según arrojó la investigación, los autores del desmembramiento intentaron desaparecer todo vestigio que pudiera identificar los restos. El joven cubano tenía un ángel tatuado en la espalda y nunca se hallaron señales de la piel con el tatuaje,  y sus dedos fueron cortados y dañada la zona de huellas dactilares, según reveló un reportaje del sitio BioBioChile.

Los homicidas usaron un serrucho y un hacha para el desmembramiento del cuerpo.

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