Justicia keniana da luz verde al trabajo de médicos cubanos

 Por Jorge González

Organizaciones profesionales y gremios de doctores en Kenia fracasaron en su intento de bloquear el despliegue de 100 médicos cubanos que se encuentran en la nación africana como parte de un acuerdo de colaboración firmado entre ambos países.

El grupo de profesionales cubanos arribó a Nairobi en dos grupos, a inicios de este mes, pero su ubicación en instituciones de salud pública en ese país fue bloqueada por demandas de doctores kenianos ante una corte de la capital.

Los demandantes esgrimieron ante la Corte de Relaciones Laborales y Empleo que el gobierno nacional está favoreciendo la importación de médicos cubanos, cuando en la nación existen unos 2.000 profesionales desempleados, y 170 especialistas altamente cualificados no han sido desplegados por el Ministerio de Salud.

No obstante, el gobierno cubano, a través de su Ministerio de Relaciones Exteriores y la prensa oficialista, publicitó el inicio del trabajo de los galenos cubanos desde su llegada al país africano, desestimando la suspensión temporal emitida por la Corte de Relaciones Laborales y Empleo, que prohibía a los médicos de la isla trabajar en la nación africana hasta que no se emitiera una decisión judicial sobre el caso.

Desde entonces, el régimen cubano continúa sin pronunciarse al respecto. Una simple mención al tema en la agenda mediática pondría en entredicho el relato oficial de que “el ejército de batas blancas” es bien recibido en cada país a donde son enviados y de que se trata de un “compromiso humanitario” de Cuba con el resto del mundo, cuando en realidad es otro negocio con el que el régimen busca apuntalar la decrépita economía nacional.

Duro revés para médicos kenianos

En lo que significa un gran golpe para los profesionales kenianos, el juez Nzioki Makau, de la Corte de Relaciones Laborales y Empleo, dijo que los demandantes no ofrecieron suficientes pruebas para demostrar el alto número de especialistas locales desempleados.

La demanda, presentada por tres doctores desempleados, en representación de toda la comunidad profesional médica keniana, aunque buscaba en concreto bloquear la emisión de licencias y permisos de trabajo para los médicos cubanos, pretendía frenar al gobierno en su política general de importación de profesionales extranjeros.

Organizaciones como la Unión de Médicos, Farmacéuticos y Dentistas de Kenia, y la Asociación de Médicos de Kenia, consideran que el gobierno está discriminando a los profesionales locales, usando el argumento de que no existen suficientes de ellos.

Asimismo, valoran que la importación de médicos extranjeros sustentada en el supuesto déficit de profesionales locales, busca ignorar las demandas de mejores salarios y condiciones de trabajo por parte de los doctores y enfermeras del país, quienes en 2017 realizaron dos largas huelgas que estremecieron el sector público de la salud.

Denuncian además que los especialistas cubanos tendrán salarios de hasta 882.180 chelines (unos $8,737 dólares), mucho más de lo que ganan los galenos kenianos, así como parlamentarios y altos funcionarios de la nación africana.

La mayor parte de estos ingresos terminan en una cuenta bancaria del régimen cubano, mientras el trabajador de la salud se queda con una mínima parte para subsistir y otra ínfima cantidad es depositada en una cuenta personal del profesional cuando este regresa a Cuba. Estos depósitos nunca se realizan enteros de un solo golpe, sino a plazos, y el “colaborador” tiene que esperar, en la mayoría de los casos, un largo periodo de tiempo antes de comenzar a recibir, poquito a poco, el dinero por el que trabajó en el exterior..

 Sindicatos a la carga

No obstante la victoria del gobierno en los tribunales, el juez Makau responsabilizó a las autoridades del país por ignorar a las organizaciones profesionales y sindicatos de médicos, a los que -consideró- el gobierno debió haber consultado antes de tomar la decisión de traer galenos extranjeros.

Asimismo, señaló a las autoridades por no haber publicitado las posiciones vacantes ofrecidas a los cubanos, lo cual atenta contra los derechos de los nacionales recogidos en la Constitución, la cual estipula que los nacionales deben ser priorizados en las contrataciones.

El grupo de médicos cubanos incluye, entre otros, nueve fisiólogos de atencion critica, tres cardiologos,cinco cirujanos ortopédicos, tres cirujanos plásticos, cinco neurólogos, tres urólogos, un neurocirujano, dos endocrinólogos y 53 médicos de familia.

Por su parte, la Asociación de Médicos de Kenia (KMA, por sus siglas en inglés) anuncia que no se dará por vencida en hacer valer sus demandas, y aseguró que la discusión sobre este problema continuará en otros foros, según reportes de la publicación local Daily Nation.

“Es difícil protestar contra el gobierno pero lo que ha quedado claro es que los kenianos se han quedado sin empleo y con esta decisión la armonia entre los médicos kenianos y extranjeros aún no se ha abordado”, dijo un representante de KMA, en las afueras del tribunal.

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