The Economist: Cuba, la vida sin Hugo Chávez
La influyente revista británica The Economist dedica un artículo central en su edición de esta semana a explorar las opciones económicas de una Cuba futura sin la protectora contribución de Hugo Chávez como presidente de Venezuela. CaféFuerte reproduce una versión en español de este sugerente texto.
Si Hugo desaparece
Raúl Castro busca otros salvavidas
Justo cuando se estaban empezando a acostumbrar a la sobrecogedora perspectiva de vida sin Fidel Castro, los cubanos se ven obligados ahora a considerar otra posibilidad aún más sobrecogedora: la vida sin Hugo Chávez. El presidente de Venezuela bien puede tener una recuperación completa del cáncer del cual fue operado en La Habana el pasado mes, pero el incidente le ha recordado que es mortal. Y tal vez no pueda permanecer en el poder más allá de las elecciones presidenciales del próximo año (ver artículo). Además de Venezuela, no hay ningún otro lugar donde su salida de la presidencia se sentiría con más fuerza que en Cuba.
Chávez subsidia Cuba por una suma cercana a los $3,500 millones anuales, mediante el envío de un estimado de 115 mil barriles de petróleo por día (alrededor de dos tercios de su consumo). Cuba paga en especie, en forma de 40 mil médicos, de expertos en seguridad e inteligencia, y de otros trabajadores enviados a Venezuela. Además, el señor Chávez está poniendo dinero para proyectos de infraestructura en la isla, tales como la expansión de una refinería de petróleo en Cienfuegos. Venezuela es también el principal socio comercial de Cuba.
La ayuda venezolana ha sido el factor más importante de respaldo para que la isla comunista pudiera salir a flote de la crisis catastrófica que siguió a la desaparición de su patrocinador anterior, la Unión Soviética, en 1991. Los cubanos adultos recuerdan la década de 1990 como un momento traumático de la escasez de alimentos y combustible. ¿Podría regresar tantas penurias?
Si los opositores a Chávez tomaran el poder en Venezuela, casi seguro que cortarían la ayuda a Cuba, sobre todo porque se enfrentan a necesidades urgentes en su propio país. Los cubanos podían esperar una escasez generalizada. Pero las cosas no serían tan terribles como en 1991. Entonces Cuba se había transformado en dependiente de la venta de azúcar a la Unión Soviética a un precio excesivo. Ahora la economía está más diversificada: la isla está produciendo más petróleo y el turismo, el níquel y las remesas de los cubanoamericanos se han convertido en importantes fuentes de divisas.
La gran esperanza de Cuba
Raúl Castro, quien sucedió a su hermano como presidente de Cuba en el 2008, ha dado señales de querer ser menos dependiente de Venezuela. Mientras que Fidel y Chávez son amigos cercanos señor -los dos fueron fotografiados hablando, ambos estaban vestidos con chándal de convalecencia, después de la cirugía de Chávez- Raúl, un hombre tranquilo y ordenado, parece incómodo con el bullicioso Bolivariano. En 2009 Raúl despidió a Carlos Lage, primer ministro de Fidel y quien era particularmente cercano a Chávez (en 2005 Lage declaró que “Cuba tiene dos presidentes, Fidel y Chávez”).
Cuba ha buscado recientemente la inversión con delegaciones visitantes de China (que ha ofrecido una línea de crédito de miles de millones de dólares), Brasil e India. Raúl está tratando de reducir las importaciones de alimentos mediante el arrendamiento de tierras a los campesinos privados. Sus otras reformas, en virtud de los cuales al menos 221 mil licencias para las pequeñas empresas se han otorgado desde octubre, pudieran hacer la isla más atractiva para que los cubanoamericanos la visiten o en un futuro pasen allí su jubilación.
Sin embargo, la principal esperanza de Cuba para conseguir la independencia económica es el Scarabeo 9, un equipo de perforación de $750 millones de dólares, construido especialmente en China sin materiales norteamericanos (evitando así transgredir el embargo de Estados Unidos contra la isla). La plataforma debe llegar a aguas cubanas a finales de año, contratada por la empresa Repsol de España para perforar un pozo petrolero exploratorio.
El Servicio Geológico de Estados Unidos, un organismo científico gubernamental, estima que los mares alrededor de Cuba tienen 4,600 millones de barriles de petróleo. Pero se encuentran en aguas muy profundas. Repsol encontró petróleo allí en 2004, pero decidió que la extracción no sería rentable. Cualquier nuevo descubrimiento podría llevar años para explotar. Si las reformas de Raúl cobran fuerza, entonces Cuba podría ser un lugar muy diferente.
Traducción: CaféFuerte
Nota relacionada:
Hugo Chávez: las tilapias de Fidel Castro y la vuelta de Zaratrusta