Académicos protestan por homenaje a Orlando Bosch en UM
Por IVETTE LEYVA MARTÍNEZ
Académicos de Estados Unidos enviaron una fuerte protesta a la Universidad de Miami (UM) por acoger en su sede un homenaje al anticastrista Orlando Bosch, condenado por acciones terroristas en territorio norteamericano.
En una carta enviada a Donna Shalala, presidenta de UM, un grupo de 40 profesores e investigadores -vinculados a universidades de Estados Unidos- reclamaron una inmediata investigación sobre un acto realizado recientemente en el Instituto de Estudios Cubanos y Cubanoamericanos (ICCAS).
“Solicitamos que se inicie con la mayor premura una investigación acerca de este homenaje, en el cual figuró como telón de fondo el logotipo de la Universidad de Miami”, expresa la misiva, encabezada por Noam Chomsky. “Como institución de altos estudios que es, la Universidad de Miami tiene una misión educativa, y a la vez, una insoslayable función de responsabilidad social. Rendir honores a un terrorista, presentándolo como modelo para una comunidad, atenta contra los principios básicos de la academia”.
El 12 de octubre, Bosch -convicto por el ataque a un buque carguero polaco en 1968- recibió un homenaje en la sede del ICCAS, ubicado en el recinto universitario. El evento, titulado “50 Aniversario del Inicio de la Lucha Guerrillera contra el Totalitarismo”, fue organizado por el Instituto de la Memoria Histórica Cubana contra el Totalitarismo, dirigido por el periodista y ex prisionero político Pedro Corzo.
Pionero contra el totalitarismo
Bosch recibió una placa de reconocimiento por “su lucha de más de setenta años por la democracia en Cuba, su enfrentamiento al totalitarismo comunista y en su condición de pionero en la organización de la lucha guerrillera en Cuba contra la dictadura castrista”.
Jaime Suchlicki, director de ICCAS, desligó la institución que dirige del homenaje a Bosch.
“Nosotros alquilamos la Casa Bacardí a varias organizaciones en Miami, entre ellas el instituto de Corzo”, dijo Suchlicki a CaféFuerte en conversación telefónica desde Nueva York. “Ya se lo hemos alquilado en otras ocasiones, y en la información que recibimos para ese evento no se anunciaba ningún homenaje. No estuvimos involucrados en ese acto. Yo ni siquiera estaba en Miami”.
La política de la Universidad de Miami, agregó el académico, es “no dar apoyo a ningún grupo, país o individuo terrorista, lo que incluye por supuesto al gobierno de Cuba también”.
Bosch, de 83 años, es considerado por el gobierno de La Habana como responsable del atentado a un avión cubano en 1976, en el que perecieron 73 personas -fundamentalmente deportistas. Nunca ha sido hallado culpable de ese ataque, por el cual fue enjuiciado y absuelto tres veces en Venezuela.
En 1968, Bosch admitió su participación en un ataque con bazuka a un barco carguero polaco. Fue condenado en Estados Unidos a 10 años de cárcel, pero salió en libertad en 1972. Previamente había sido arrestado por posesión de explosivos e intento de extorsión.
El gobierno cubano usa la libertad de que disfruta Bosch en Miami como un elemento de propaganda contra el exilio cubano.
Entre los firmantes de la carta a Shalala se encuentran académicos de origen cubano como Emilio Bejel, Ana M. López y Alejandro de la Fuente. La carta contiene una nota aclaratoria indicando que quienes la suscriben no comparten necesariamente las mismas opiniones sobre el sistema político de Cuba, el embargo u otros temas vinculados a la relación Cuba-Estados Unidos.
Cañonazo contra el Polanica
En el juicio de 1968, Bosch admitió haber suministrado el cañon de 57 mm usado para atacar el carguero polaco Polanica -aunque afirmó que él no apretó el gatillo- así como posesión de grandes cantidades de explosivos con el fin de enviarlos a Cuba.
El ataque al Polanica, anclado en la isla Dodge de Miami, obligó al Departamento de Estado a enviar una nota de disculpa al gobierno de Polonia. El barco sufrió daños, aunque nadie resultó lesionado en el ataque.
Tras cumplir la condena, Bosch violó su parole en 1974 y viajó a América Latina, donde participó – según funcionarios estadounidenses- en varios actos violentos, incluyendo atentados.
En 1987 entró ilegalmente en Estados Unidos, por lo cual fue arrestado poco después. El 18 de julio de 1990 fue liberado por el Departamento de Justicia bajo un “parole limitado”. Desde entonces reside en Miami.
Bosch, graduado de medicina, publicará este año un libro de memorias, en el que narra su participación en la lucha clandestina en la isla como integrante del Movimiento “26 de julio”, y su trayectoria posterior como militante anticastrista en el exilio desde 1960. El libro, titulado Los años que he vivido, se presentará en Miami a comienzos de diciembre.