Destituyen al presidente de CIMEX
Eduardo Bencomo Zurdos, un hombre del círculo de confianza de Fidel Castro durante décadas, fue sustituido como presidente de la megacorporación CIMEX por militares vinculados al grupo empresarial de las Fuerzas Armadas.
“La destitución de Bencomo se hizo efectiva hace como dos semanas”, dijo a CAféFuerte desde La Habana un empleado de CIMEX que pidió anonimato. “La corporación ha pasado a manos del grupo GAESA [perteneciente a las Fuerzas Armadas, FAR].
La nueva jefatura está encabezada por el coronel Héctor Oroza Busutin, quien fungía como vicepresidente de GAESA, informó este lunes la agencia Reuters.
“En estos momentos se está produciendo un traspaso del mando de toda la corporación y la nueva jefatura se está entrevistando dirección por dirección y division por division, con sus respectivos jefes y equipos de trabajo”, agregó el informante. “Este proceso comenzó hace unos diez días”.
Bencomo, de 66 años, un urólogo que atendió el tema médico en el llamado Grupo de Apoyo a Fidel Castro, dirigió el CIMEX durante 20 años. Se le consideraba un administrador eficiente y un funcionario de alta estima entre la élite del poder.
“Esta es una señal muy fuerte de que Fidel no está en control absoluto de la situación y menos en la toma de decisiones en la esfera económica”, comentó a CaféFuerte el ingeniero Emilio Morales, quien fue jefe de Mercadotecnia de CIMEX hasta el 2006 y ahora reside en Miami.
Morales, autor del libro Cuba: ¿tránsito silencioso al capitalismo? (2009), cree que se trata de “una consolidación definitiva de la estrategia de mando de Raúl Castro y una señal de que Fidel no retornará al poder”.
“Fidel ya no tiene fuerzas para sostener su filosofia y menos para imponerla”, explicó Morales. “A partir de ahora sera el estilo de Raúl, a partir de ahora los análisis sobre Cuba habrá que hacerlos teniendo en cuenta este elemento de cambio”.
Hombre de pocos amigos
El economista Marzo Fernández, opinó que la destitución tiene que ver con luchas internas por el poder.
“Este era un hombre de la total confianza de Fidel, un tipo de austeridad y fidelidad totales que no había por donde cogerlo… Personaje de pocos amigos, pero con muchos enemigos”, manifestó Fernández, quien desertó en una misión oficial en México en 1996 y se radicó en Estados Unidos. “Tengo la percepción que su caída tiene que ver con la salida de Yadira García [ex ministra del Ministerio de la Industria Básica]”.
García fue destituida como titular del MINBAS el pasado 20 de septiembre por “deficiencias en la dirección del organismo”. La sustitución de Bencomo se habría producido varios días antes.
Ambos dirigentes trabajaron juntos en el Equipo de Coordinación y Apoyo de Fidel Castro en los años 80.
Bencomo fue designado por Fidel Castro al frente de CIMEX en 1989 en sustitución de Emilio Aragonés poco después de destaparse el caso contra el general Arnaldo Ochoa y el coronel Tony La Guardia, y producirse el arresto del entonces Ministro del Interior, José Abrantes.
El papel de Bencomo se consideró clave en el crecimiento, eficiencia y transformación de CIMEX en el mayor conglomerado empresarial cubano, que actualmente representa el 45 por ciento del mercado minorista en divisas del país.
De ese mercado el Grupo GAESA sólo tiene el 18 porciento, mientras que el resto se reparte entre otras instituciones que responden directamente al Consejo de Estado. Los ingresos anuales de CIMEX superan los 1,000 millones anuales.
Recaudación como arma política
Fundada en 1978, CIMEX cuenta nacionalmente con 2,500 tiendas y 35 líneas de negocios entre gasolineras, cafeterías y otras unidades de venta al público. Entre sus compañías figuran Transcimex (dueña de la compañía naviera Melfi Marine en Panamá), Inmobiliaria CIMEX, el Banco Financiero Internacional, la discográfica Abdala, la cadena de comida “El Rápido” y la casa de modas La Maison.
Bencomo sobrevivió en el 2003 a un escándalo de corrupción que implicó al CIMEX y altos funcionarios la cúpula estatal relacionados con sucursales de firmas extranjeras. El caso llevó a prisión –con sanciones de hasta 20 años- a una docena de funcionarios, en lo que se calificó como el mayor caso de delitos de cuello blanco ocurrido en la isla desde que se autorizaron las asociaciones económicas mixtas y se flexibilizó el comercio internacional en los años 90.
“En las reuniones de la gerencia de CIMEX con sus proveedores nacionales solía invitar al secretario provincial de Partido [Comunista] y tenía la muletilla de que la recaudación de CIMEX era ‘un arma política’ que se entregaba a Fidel”, escribió un abogado que trabajó en el CIMEX y vive actualmente en España.