“Todo el mundo en Cuba le tiene terror al gobierno”

Por Ivette Leyva Martínez

El joven canadiense Cody LeCompte describió los tres meses que pasó retenido en Cuba como una “experiencia aterradora” y aseguró que en el futuro ni siquiera desea acercarse a la isla caribeña.

“Me sentí amenazado todo el tiempo”, relató LeCompte a CaféFuerte. De acuerdo con su abogado cubano, el joven enfrentaba entre uno y tres años de cárcel a causa de un accidente automovilístico en el que no  murió ninguna persona.

LeCompte, de 19 años, llegó a Cuba como regalo familiar por graduarse de bachillerato y obtener matrícula en una escuela de aviación. Dos días después, al mediodía del 29 de abril, cerca de Nuevitas, Camagüey, un camión chocó el auto Hyundai que él conducía. Los cuatro ocupantes del Hyundai resultaron lesionados, entre  ellos una mujer cubana, novia de un primo de LeCompte, mientras que el chofer del camión salió ileso.

Los heridos fueron conducidos de inmediato al hospital de Nuevitas. Allí Cody pasó una noche que describió como salida de una película de horror.

“Las condiciones no son como las de los hospitales de Canadá. Los  portasueros están oxidados, vi sangre en las paredes. Nadie hablaba inglés allí, sólo un médico que me examinó una sola vez. Las enfermeras andan por los pasillos y se asoman a ver a los pacientes una o dos veces”, relató.

LeCompte fue atendido esa noche por las contusiones que recibió en el choque, pero no así por una lesión en su mano izquierda. Médicos canadienses creen que es posible que necesite cirugía.

El joven aún desconoce por qué estuvo retenido por tanto tiempo y sujeto a una investigación por las autoridades de la isla. “Nadie nos explicaba por qué y la policía insistía en que necesitábamos nombrar un abogado”, contó durante la entrevista telefónica desde Simcoe, Ontario.

Un abogado internacional canadiense se ofreció para ayudar a la familia de manera gratuita, pero las autoridades cubanas insistieron en que debía usar un abogado cubano -a un costo de $3,000 dólares más gastos de transporte y otros. Nunca se le formularon cargos.

LeCompte no fue encarcelado, pero se vio obligado a permanecer en el hotel Gran Club de la playa camagüeyana de Santa Lucía. Su madre, Danette LeCompte, lo acompañó durante casi todo el tiempo.

Los cubanos con los que se relacionó Cody le causaron  una misma impresión: estaban atemorizados.  “Todo el mundo en Cuba le tiene terror al gobierno. Incluso me pedían que no mencionara sus nombres. Eso me enseñó a apreciar más la libertad de expresión que tenemos en Canadá”, recordó.

El joven cree que su traumática experiencia debería enseñar a los canadienses a documentarse mejor antes de hacer turismo. “Deben ser especialmente cuidadosos si quieren viajar a un país comunista”, recomendó.

Para él, el principal peligro para los turistas en Cuba son sus carreteras: “Están llenas de huecos, no tienen señales y se te cruzan animales en cualquier parte”.

La amplia cobertura mediática que recibió el caso en Canadá -y la ira de los canadienses con la que pasividad de su gobierno ante la situación de LeCompte-  condujo a su liberación.

El pasado 29 de julio, después que el Ministerio de Relaciones Exteriores de Canadá advirtiera a La Habana de las posibles consecuencias en el turismo canadiense hacia la isla,  Cuba decidió cerrar el caso y autorizar el regreso del joven a Canadá. LeCompte volvió a su casa el pasado viernes 6 de agosto.

Cuba recibe anualmente unos 600 mil visitantes de Canadá, el mayor emisor de turismo hacia la isla.

El acuerdo firmado entre LeCompte y las autoridades cubanas incluye el pago de una fianza de 2 mil pesos cubanos (unos 85 dólares) y el compromiso de retornar a Cuba si es citado judicialmente.

La forzada estancia en Cuba dejó a la familia al borde de la quiebra. La familia LeCompte calcula que gastó unos 30 mil dólares entre viajes, trámites, hospedaje y honorarios al abogado. La madre de Cody es soltera y trabaja como empleada en la corte local de Simcoe, Ontario -localidad donde vive.

Grupos de apoyo han organizado un concierto de recaudación el próximo 3 de septiembre y han establecido un fondo de ayuda.

Cody, quien espera ingresar a la escuela de aviación Sault College en el otoño, no desea volver nunca más a Cuba, ni siquiera sobrevolarla, incluso si la democracia llega a la isla caribeña.

“Aunque las cosas cambien, no me van a cambiar a mí”, confesó.

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Fondo de ayuda para la familia LeCompte:

TD Canada Trust
Branch 83
46 Norfolk Street North
Simcoe, Ontario
N3Y 5C3
Account 6330413/ Account in Trust for Cody LeCompte

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