Expulsión laboral/1970

Este documento, que acaba de cumplir 40 años, testimonia un nefasto período de acoso político y ejemplifica la ilegalidad con que el régimen cubano ha operado para manipular los vínculos laborales de los ciudadanos como instrumento de respaldo gubernamental.

El caso de Mario López Fernández habla de un hombre anónimo, humilde y trabajador, victimizado por no comulgar con los dictados del totalitarismo ideológico y las movilizaciones propagandísticas de la época.

López aprendió los secretos de la carrocería desde niño y se hizo chapistero. Vivió y trabajó en Estados Unidos entre 1954 y 1958. Regresó luego a la isla, pero sus convicciones no sintonizaron nunca con el sistema impuesto allí. Abandonó definitivamente el país en 1981 y falleció en Miami en 1998, a los 67 años.


El documento, ampliado en pdf, aquí.

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